Pagano, Julio | Bio

Pagano nos habla a través de sus obras de sí mismo y de su percepción desangelada del mundo. Es un arte comprometido para consigo mismo proyectado hacia los demás como opinión, con ausencia del concepto un tanto trasnochado ya de “lo bello” formal.

Los espacios plásticos se articulan de diverso modo y medida, pero siempre atendiendo a definiciones propias de la geometría sensible insólita y subjetiva, tanto por la entonación cromática contenida como por los grisados y recorrido lineales de tensión emocional evidente. No aparece en ningún trabajo la descripción sino la connotación. Las imágenes no hablan desde una “otredad” muy particularizada.

Una despojada materialización de las escenas, la ausencia deliberada de espesas texturas matéricas, el diálogo entre matices, luces y sombras, los planos recortados y tintes asordinados ponen en evidencia la voluntad del creador por sujetar su discurso visual a un propósito expresivo deliberado ajeno a los repentinos temperamentales o fortuitos. La línea como definición es una constante que aparece o se insinúa, pero siempre se impone.

La “desmaterialización” es una constante. La delicada entonación de los grisados se vincula con el deambular de la línea que ora define, ora se retuerce espasmódicamente sobre sí misma, intensificando la expresión corrosiva de la forma que Julio Pagano inscribe una y otra vez en sus figuras. Su elíptico discurso en torno al sinsentido de tanto acontecer humano sobre el cual se discurre, se ironiza, se pregunta y repregunta siempre está sostenido por un tenso y delicado tratamiento formal.

 

Fuente: Domingo Sahda

Obras del Artista

Más información

Pagano, Julio
"Desnudito"
Tecnica mixta sobre papel
95 x 65 cm
1988

Más información

Pagano, Julio
"El asesinadito"
Pastel sobre papel
33 x 33 cm
1984

Diseño y Programación Paulo Lucia